Kenia (Octubre 2022)
Esta maravilla de viaje lo he hecho con un grupo de amigos «los bichosbola», a los cuales conocí hace 10 años, precisamente en otro viaje a África. Fue entonces cuando dijimos que en 10 años volveríamos juntos a este continente, y cosa rara lo hemos cumplido. A pesar de ser cada uno de una provincia española, hemos mantenido el contacto y nos hemos visto en más de una ocasión. Todos coincidimos en la pasión por viajar y tratándose de África el entusiasmo por su fauna salvaje.
Este no ha sido un viaje organizado por nuestra cuenta, ni siquiera nos lo planteamos, entre otras cosas porque disponíamos sólo de 12 días, así que recurrimos a la Agencia de viajes WAU, los cuales nos organizaron a petición nuestra un viaje privado para 6 personas, cumpliendo nuestra principal prioridad que era ver cuantos más bichos mejor.
Mi valoración global sobre Wau viajes es positiva, porque se ciñó a aquello que le habíamos pedido y nada que objetar sobre los alojamientos o sobre la agencia local GLORY SAFARIS, que fue la encargada de guiarnos por los maravillosos parques nacionales de su país, de la mano de nuestro guía Norman.
En cuanto al precio, a pesar de costar una pasta, si comparamos con otras agencias y valoramos que era un jeep y guía para nosotros solos yo creo que está muy bien.
Unicamente encontré a faltar asesoramiento con los trámites de los visados y demás documentos a cumplimentar. Ahí me sentí al borde del colapso. Es una tarea realmente engorrosa y en mi opinión la agencia debería habernos ayudado.
Lamu es una tranquila isla tropical con dos poblaciones: Lamu town y Shela. En Shela estaba nuestro alojamiento y según el folleto de Wau viajes es la zona 
mas «chic» si allí a algo se le puede decir chic. Es cierto que es la zona más turística. Toda la isla tiene mucho encanto, pero está muy mal conservada, sobre todo Lamu town.
Para desplazarte de una población a la otra debes coger un barquito y «pelearte» el precio. Yo hice ese recorrido sola y lo que comenzó siendo una tortura por preguntar (por señas porque yo de inglés cero patatero) cuanto me cobrarían del recorrido a más de un barco, acabo siendo una aventura.
Me habían recomendado no pagar más de 400 chelines kenianos (unos 4€). Finalemente me aceptaron en un «dhow» en el cual había otras dos pasajeras, una local y una asiática, que debió ser la única que había pagado la excursión, ya que si mi recorrido debía durar 10′ se convirtió en casi 2 h de navegación para ver un preciosísimo atardecer por 4€.Por supuesto que yo no entendía nada y los «notas» que componían la tripulación, aunque graciosos, no me daban ninguna confianza y el hombre que manejaba el dhow no paraba de masticar khat. Aún así fue una experiencia fantástica
Esa misma mañana, nosotros hicimos la excursión en dhow (nave artesanal de un solo palo con vela triangular), donde nos llevaron a hacer snorkel a los que queríamos y después nos prepararon la comida en el barco, que sorprendentemente estaba muy buena (el precio de la excursión fue de 40€ por persona). Para hacer compras, en Lamu town hay una tienda de comercio justo donde no tienes que estar negociando el precio. Y en Shela hay puestecitos de artesanía local.
Los días que pasamos en Lamu fueron días de relax, disfrutando de un paraíso sin coches, de las cervecitas frente a la playa y de las ultimas compras.
La primera noche, cenamos en el Pepponi, hotel que está mirando al mar. Y otro día comimos en Lamu House en Lamu town. En ambos casos muy bien, Pepponi más lujo y mas caro, pero Lamu house a mí me pareció más auténtico.
